"Entre cielo y tierra" de Jón Kalman Stefánsson

  "El infierno es tener brazos y nadie a quien abrazar"

"Toma elixir chino de la vida y las molestias desaparecerán para no volver nunca. Nuestra existencia es un caminar sin pausa hacia la salvación, hacia lo que pueda consolarnos, hacia lo que nos proporcione felicidad, nos proteja de todo mal. Algunos recorren un largo y difícil camino y quizá nunca encuentren nada , excepto algo solo parecido a un objetivo, una especie de solución o alivio para el camino mismo, y nosotros admiramos su presencia de ánimo, pero ya tenemos suficiente con la mera existencia y, en vez de seguir buscando, tomamos elixir chino de la vida, y nos preguntamos cuál es el camino más corto hacia la felicidad, y hallamos respuesta en Dios, en la ciencia, en el aguardiente, en el elixir chino de la vida" En estas últimas semanas he descubierto la literatura islandesa, a través de esta preciosa novela, y de otras dos de Audur Ava Ólafsdóttir. Es una literatura distinta incluso a la nórdica. Tienen una forma narrativa eminentemente descriptiva, evocadora, y donde las vidas de los personajes aparecen marcadas por su relación con la naturaleza: los paisajes agrestes, el mar turbulento, el clima frío y/o helador, la falta de luz, y la situación física de la propia isla condicionan la trayectoria vital de los personajes que aparecen en estas novelas. Escribe Stefánsson en su libro: “El mar a un lado, montañas rotas y altísimas al otro: he aquí toda nuestra historia”. Para conocer algo más sobre Islandia y su literatura merece la pena leer este artículo de la Revista Qué Leer titulado: Letras islandesas. En la entrevista Kalman, entre otras cosas interesantes dice: "La lectura puede ser peligrosa en el sentido de que la literatura debería contar para algo, afectar a la gente, hacerles pensar, hacerles dudar… forzarlos con suavidad pero a la vez con firmeza a ver el mundo de un modo diferente. Y, en una sociedad como la que estoy describiendo, la literatura es considerada casi como una amenaza porque hace a la gente soñar con un mundo mejor. Y los que sueñan con un mundo mejor tienden a cambiar sus parámetros de vida y en algunas sociedades los cambios son vistos como amenazas".